BENDICIÓN DE LAS MASCOTAS
Por: Alba Juárez Amador.
En el marco del día en que recordamos a san Antonio, abad, cada 17 de enero, -en tiempos que no eran de pandemia-, mascotas de todo tipo eran llevadas a los templos para que los sacerdotes las bendijeran; hoy, la situación es diferente y debido al confinamiento, las celebraciones y bendiciones se llevarán a cabo de manera virtual, aunque el significado de este gesto no se pierde.
La bendición de los animales es una tradición antigua, incluso se realiza desde hace años en todo el mundo y en diversos credos, pero con los católicos se lleva a cabo el día del “protector de los animales”.
San Antonio, abad
Fue un hombre que nació en una familia de buena posición económica, pero quiso seguir en vida las palabras de Jesús y dejar todo para seguirlo… así que se deshizo de sus bienes materiales y prefirió una vida en soledad y con lo mínimo que requería para vivir, por lo que se le conoce como, fundador del monaquismo.
Se dice que vivió en lugares tan desérticos que incluso sólo había serpientes, pero estas no le molestaban; como dedicó su vida a la oración y la contemplación recibió tentaciones y manifestaba que se le presentaban animales; tiempo después, esa fue la razón por la que pintores que escuchaban de este ejemplo de vida, lo representaban rodeado de animales, con el paso del tiempo la gente veía su imagen y al observar animales en su pintura, los fieles lo fueron conociendo como el protector de ellos.
Al inicio cuando las personas sólo contaban con animalitos para ayudarse en las labores del campo, lo que llevaban a bendecir eran a los animales de labranza, y lo hacían en los primeros días del año ya que pedían a Dios les ayudaran en el trabajo para obtener buenas cosechas; así se observaban bueyes, mulas, caballos o animalitos de granja; se daba el caso de que algunos pequeños se encariñaban con otras especies más pequeñas y poco a poco fueron presentando otros a la bendición.
Al paso de los años, con la revolución industrial las formas de vida fueron cambiando y la vida en las grandes urbes era diferente, pero la costumbre permaneció y los animalitos eran cada vez más diversos, pero todos quieren que sus mascotas sean bendecidas.
La bendición
Todos queremos ser bendecidos, e incluso deseamos siempre el bien y la gracia para los que amamos; las personas nos encariñamos tanto con las mascotas que también para ellos queremos cosas buenas, porque también ellos fueron creados por Dios y así también agradecemos a Dios por su existencia.
Es una responsabilidad cuidar, educar y no darles un sentido humano a las mascotas, son seres que requieren de nuestra atención y siempre dándoles el lugar que merecen en nuestro hogar.
Seguramente en tu parroquia, este 17, después de la santa Misa, el sacerdote destinará un tiempo para bendecir a tu mascota, así que ¡alístala para este hermoso momento! Ya que recordando las palabras del Papa Francisco: “a través de los animales, los seres humanos proclamamos la sabiduría y grandeza del Señor, quien nos ha puesto a estas creaturas no sólo para admirarlas, sino para cuidarlas y compartir la vida con ellas” (Laudato Sí).
Oración a San Antonio Abad para pedir por las mascotas
Señor Celestial, Padre Creador de todas las cosas,
hoy quiero pedir tu misericordia y compasión para mi mascota,
y por mediación de san Antonio Abad,
llamado también san Antón, el gran protector de los animales,
que tanto amor tuvo estas criaturas,
te ruego que no le abandones nunca
concédele salud, que no sufra ni padezca,
que no este triste, que no le falten las fuerzas
que no sienta dolor ni angustia,
que no se sienta solo
y que siempre tenga a su lado alguien que le cuide con amor.
Por el poder de Tu amor,
permite que… (nombre de la mascota)
viva feliz y sano,
que tenga todo lo necesario según Tu deseo.
Cuídalo y protégelo,
que no le falte alimento, cama y reposo,
que no carezca de amigos, amor y respeto,
pon tu mano sobre él si cae enfermo,
no permitas que nada ni nadie le cause daño,
ni que se pierda o lo roben,
yo le quiero como un miembro más de la familia
y siempre estaré a su lado
dándole todo mi cariño y cubriendo sus necesidades.
Te pido tu especial bendición y ayuda
en estos momentos que… (nombre de la mascota)
necesita tanto de ti,
(pedir por salud, o robo, o extravío, protección, problemas …):
(hacer la petición).
Señor, te ruego también que,
por intercesión de San Antonio Abad,
tengas piedad de los hombres que por ignorancia
maltratan a los animales,
enséñales a que los amen como criaturas tuyas.
Señor, ten piedad de los animales domésticos,
que muy a menudo son entregados y abandonados,
sin defensa alguna,
a la indiferencia y a la crueldad humana:
no los dejes solos con sus penas.
Señor Dios, ten piedad de los animales
como el león, el tigre, el mono, el elefante
y otras especies que son capturados
para ser llevados a circos o a zoos:
dales a todos ellos un refugio seguro en su hábitat.
Señor, ten piedad de los animales de granja
que crecen dentro de inhóspitos habitáculos,
así como de aquellos animales que en los mataderos
son sacrificados sin anestesia: acógelos con su dolor.
Señor, ten piedad de los animales de experimentación
haz que cesen estas prácticas y sálvalos de su sufrimiento.
Señor, Tú que infundiste en San Antonio Abad
un gran amor a la pobreza y al respeto de los animales,
ten piedad de todos los animales que sufren
y haz una sociedad más justa basada en el amor y la paz
de todos los seres que pueblan el planeta.
Amén.