En los sueños de los ancianos está el futuro de la sociedad
Amedeo Lomonaco – Ciudad del Vaticano
La Jornada Mundial de los Abuelos y los Ancianos, que se celebrará el 24 de julio en el marco del año dedicado a la “Familia Amoris laetitia”, se suma a las jornadas de la Palabra de Dios y de los Pobres. Así lo asegura el doctor Vittorio Scelzo, del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, quien destaca que “los pobres, la Biblia y los ancianos emergen como tres prioridades” del Pontificado del Papa Francisco. Son tres prioridades destinadas “también a marcar el futuro de la Iglesia”. Hay que recomponer “la fractura entre los ancianos y las demás generaciones”. “Los ancianos, afirma el Dr. Scelzo, no se salvan por sí mismos. Desgraciadamente vimos durante la pandemia cómo muchos ancianos no se salvaron”. “El Papa quiere decirnos que tampoco los jóvenes, los adultos y nuestra sociedad se salvan por sí mismos sin los ancianos”. El diálogo intergeneracional es imprescindible. “Para salir de la crisis mejores y no peores, es necesario que toda sociedad se reconcilie con sus raíces y desarrolle una nueva síntesis de sus propios valores también a partir del diálogo con los mayores”.
Los sueños de los mayores
“Lo contrario de la cultura del descarte, subraya el doctor Vittorio Scelzo, es precisamente la pastoral de los ancianos: poner a los mayores en el centro de la vida de nuestras comunidades cada día. No solo en las emergencias, no solo cuando nos damos cuenta demasiado tarde”. Los ancianos “son árboles que siempre dan fruto y personas que siguen soñando”. Hay que “poner a los jóvenes en diálogo con los sueños de los mayores”. El encargado de la Pastoral de los Ancianos del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, destaca que “esto es algo que el Papa Francisco repite a menudo. Los sueños de los mayores son los que han construido nuestra sociedad; por ejemplo, pienso en Europa, en un mundo sin guerras nunca más”. La encíclica Fratelli tutti está llena de “este sueño de un mundo sin guerra”. Es el sueño que “nuestros ancianos, nuestros abuelos, tuvieron después de la Segunda Guerra Mundial”. “Tal vez, concluye el Dr. Vittorio Scelzo, tengamos que dialogar con estos sueños. También para entender cuáles deben ser los sueños para el futuro de nuestra sociedad”.