50 Aniversario de los Cruzados de Cristo Rey

50 Aniversario de los Cruzados de Cristo Rey

Los Cruzados de Cristo Rey somos una Sociedad de Vida Apostólica, comunidad de sacerdotes y seminaristas en formación, que tenemos como fin último la gloria y alabanza de Dios, y por fin propio apostólico contribuir a formar el espíritu social cristiano de los fieles a todos los niveles y ambientes, para imbuir del espíritu del Evangelio la vida pública, profesional, social, jurídica y política, y extender así la realeza de Cristo sobre los hombres y sobre las sociedades.

Nacimos el 25 de enero de 1971, en la parroquia del Sagrado Corazón y de San Ciro en la entonces diócesis de Tlalnepantla, estado de México, con el nombre de Cruzados de Cristo Rey, fue una fundación realizada por un grupo de sacerdotes, religiosos, laicos y el grupo de jóvenes con la inquietud sacerdotal, constituyéndonos en un primer momento de manera privada, quedando a prueba para ir buscando la voluntad de Dios para la sociedad naciente e ir encontrando la aprobación de la Iglesia con los pasos jurídicos que nos fuera indicando.

Desde el principio de nuestra fundación, se buscó el trabajar con una vida cristiana y comprometida para que Cristo reine en la sociedad mediante el apostolado y en sus miembros mediante la vida fraterna en común, teniendo claro, como se había establecido en las actas fundacionales, las finalidades apostólicas de: promover el sentido profundo de la fe que ha de guiar el amor y la estima al Papa; investigar, enseñar y difundir la verdad del mensaje revelado de la salvación; vivir profundamente el gozo de la variedad riquísima de los carismas de la Iglesia en su promoción y respeto en comunión con los obispos; propagar y difundir la conciencia social cristiana de los fieles.

Los primeros años de vida los Cruzados sus miembros antes de ingresar realizaban un tiempo de prueba de misión en diferentes partes de la República Mexicana, promoviendo y dirigiendo retiros espirituales para jóvenes y colaborando en las misiones; posterior a dichos años de prueba iniciaban la vida comunitaria y los estudios requeridos para la formación sacerdotal.

El 15 de septiembre de 1983 recibimos de parte de Mons. Don Hilario Chávez Joya Obispo de la entonces prelatura de Nuevo Casas Grandes, Chihuahua, el rango de Pía Unión conforme al Código de Derecho Canónico (C.I.C) de 1917 vigente todavía aquel año. A partir de 1984 se dieron las primeras ordenaciones sacerdotales y la Sociedad así se iba afianzando. Para 1991 llegamos a contar con 67 miembros, de los cuales 19 eran sacerdotes. Fue el 8 de abril del mismo año que Don Hilario tuvo a bien emitir el decreto por el que fuimos aprobados los Cruzados de Cristo Rey canónicamente como Sociedad de Vida Apostólica clerical de derecho diocesano de acuerdo al C.I.C. de 1983, y declarando que el camino de vida evangélica que describen nuestras Constituciones está de acuerdo con el Evangelio.

A través de nuestras Constituciones abrazamos y buscamos seguir la Cruz en la vivencia de nuestro Carisma y de la Espiritualidad de Cristo Rey en sus cuatro vertientes: eucarística, apostólica, expiatoria y mariana. A su vez, cumplir con los fines apostólicos específicos: la vida fraterna en común, la defensa del pontificado, la investigación y defensa de la verdad, y la estima por los demás carismas. También asumimos en nuestra consagración los consejos evangélicos: pobreza, castidad, obediencia y para los Cruzados el del Espíritu de Martirio.

Los Cruzados desarrollamos en México apostolado en varias ciudades ya en el campo parroquial, ya en el campo universitario y en la educación, hasta en la pastoral militar. Llegamos a consolidarnos en España, Argentina, Honduras y Roma, en ésta última algunos miembros fueron llamados a trabajar en la Santa Sede. Sin embargo, a finales de los años noventa nos sobrevinieron tiempos difíciles donde llegamos a perder el rumbo y algunos de los miembros quisieron optar por nuevas formas de vida y sentido del carisma de nuestra obra. Fue entonces que en el año 2003 nuestro obispo ordinario en esa época, el Cardenal Norberto Rivera Carrera, por medio de Decreto del 24 de julio de 2003 autorizó la separación de algunos de los miembros que optaron por salir de la comunidad para realizar una nueva obra, constituyendo una realidad distinta del carisma de los Cruzados, ahora llamados ellos Siervos de Jesús, quedando en la Sociedad tan sólo diez sacerdotes y un seminarista, los cuales juntos comenzaron una etapa de reconstrucción.

A partir del 2004 comenzaron a llegar nuevas vocaciones. Entre los años 2004 y 2007 realizamos una serie de Congresos anuales donde pudimos profundizar en la identidad de nuestra Sociedad, en nuestra espiritualidad, el carácter y naturaleza de nuestra obra, en la misión, apostolado y servicio a la Iglesia, resultando como fruto de estos encuentros nuestro Documento de Identidad. Así mismo retomamos la presencia en la Ciudad de Puebla, que se había dejado, donde llegamos a realizar apostolados en la pastoral universitaria, el acompañamiento en colegios y universidades, así como a religiosas y fieles laicos. En el 2017 editamos nuestro libro de Historia de los Cruzados, fruto del esfuerzo de algunos miembros que se dedicaron a esta labor de investigación de los documentos históricos y ayudados también de la participación de los miembros en las reuniones que año con año vinimos realizando también a partir de dicha fecha, reuniones en las cuales nos encontramos todos los miembros de la Sociedad y donde buscamos fortalecer nuestra vida de comunidad a través del encuentro de todos los miembros.

Actualmente estamos presentes en las diócesis de Ciudad Juárez, Chihuahua; de Roma, Italia; en la Arquidiócesis de México y de Puebla. El obispo que es nuestro custodio es el Sr. Cardenal Carlos Aguiar Retes en la Arquidiócesis de la Cd. México. Tenemos seis casas de las cuales una es de gobierno general, tres son de formación, y cuatro de apostolado, aunque en todas realizamos labores de apostolado y servicio a la Iglesia.

Nuestra presencia en la Arquidiócesis de Puebla. Los Cruzados llegamos a Puebla en el año de 1977. En su momento llegamos a colaborar en la Pastoral Universitaria, en la formación de grupos de adolescentes y jóvenes, y en la formación de grupos de montaña. Actualmente los Cruzados que integramos las comunidades en Puebla somos: nueve miembros de alianzas temporales y cuatro sacerdotes de alianzas perpetuas. Contamos aquí con dos casas, una ubicada en Tlaxcalancingo donde se encuentra la etapa de formación en la filosofía, y la otra ubicada en el Fraccionamiento San José Vista Hermosa donde se encuentra la etapa inicial en que llegan a su primer año de prueba los que desean ingresar. Contribuimos en la arquidiócesis a través de nuestro ministerio sacerdotal dentro de las capellanías de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) así como de sus preparatorias, del Instituto México de Puebla (en concreto del Plantel San Pedro); participamos en el apoyo pastoral del Colegio Central de las Hermanas de la Caridad del Verbo Encarnado (CCVI). También hemos venido haciendo una labor de apoyo en misiones de Semana Santa y Navidad con grupos de jóvenes de diferentes escuelas donde hemos servido a las parroquias en las localidades de San Pedro Tlaltenango, Cuetzalan, Jonotla, Zacapoaxtla, Mazatepec, Xalitzintla, Coatzingo, el Mirador y San Francisco Ixtacamaxtitlán, Cuatexmola el Mirador, Zacatlán, Nanacamila y Molcaxaj.

Agradecidos por Dios por sus dones y por el don maravilloso de esta vocación y carisma para nosotros y para toda la Iglesia, queremos compartirles que el próximo lunes 25 de enero celebraremos el 50 Aniversario de nuestra Fundación y durante todo el año tendremos Año Jubilar donde tendremos la oportunidad de recibir la -indulgencia por este motivo. Los invitamos a que sean parte de nuestra gran alegría y se unan ese día a la celebración Eucarística que transmitiremos en nuestras redes sociales y a la Novena que estaremos llevando como preparación a la fiesta por medio de las mismas redes. Y a todos los jóvenes que sientan la inquietud por conocernos los invitamos a que se animen a descubrir la vocación de Cruzado de Cristo Rey contactándonos, para que así nosotros te busquemos.

¡Viva Cristo Rey!