Por: Amedeo Lomonaco – Ciudad del Vaticano.
El décimo Encuentro Mundial de las Familias seguirá una modalidad inédita. Adoptará una dimensión “multicéntrica y extendida”. Roma será la sede principal, pero en los mismos días cada diócesis podrá ser el centro de un Encuentro local para sus propias familias y comunidades. Todas las familias del mundo pueden ser protagonistas. “Todos podrán participar – subraya el Papa en el videomensaje – incluso aquellos que no puedan venir a Roma”. Del Pontífice, también la exhortación a ser dinámicos, activos y creativos.
El amor familiar
El tema del próximo Encuentro Mundial de las Familias está relacionado con el amor familiar como vocación y camino de santidad. El evento está organizado por el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida y la diócesis de Roma, y tendrá lugar en el sexto aniversario de Amoris Laetitia y cuatro años después de Gaudete et Exsultate. El objetivo del encuentro es releer Amoris Laetitia a la luz de la llamada a la santidad de Gaudete et exsultate, partiendo de la conciencia de que el amor conyugal y familiar revela el precioso don de la convivencia.
La presencia del Señor -se lee en la exhortación apostólica postsinodal Amoris Laetitia– habita en la familia real y concreta, con todos sus sufrimientos, luchas, alegrías e intentos cotidianos. Cuando se vive en familia, allí es difícil fingir y mentir, no podemos mostrar una máscara. La espiritualidad del amor familiar – subraya el documento -está hecha de miles de gestos reales y concretos. En esa variedad de dones y de encuentros que maduran la comunión, Dios tiene su morada. Esa entrega asocia «a la vez lo humano y lo divino», porque está llena del amor de Dios. En definitiva, la espiritualidad matrimonial es una espiritualidad del vínculo habitado por el amor divino. “Hay muchos matrimonios santos, -dice además la exhortación apostólica Gaudete et exsultate– donde cada uno fue un instrumento de Cristo para la santificación del cónyuge.
Encuentros Mundiales de las Familias
El año 1994 fue declarado por las Naciones Unidas “Año Internacional de la Familia”. También en la Iglesia, el Papa Juan Pablo II quiso que se celebrase contemporáneamente un Año de la Familia y tuvo lugar el I Encuentro Mundial de las Familias, en Roma el 8 y 9 octubre 1994, promovido, al igual que todos los encuentros sucesivos por el Pontificio Consejo para la Familia.
Desde ahora, cada tres años, en diferentes lugares del mundo, se ha celebrado un Encuentro Mundial de las Familias introducido por un Congreso teológico-pastoral internacional y finalizado, en presencia del Papa, con una vigila- festival de las familias y con una gran celebración eucarística de clausura.
1. S. Juan Pablo II – I Encuentro Mundial: 1994 (8-9 octubre) Roma(Italia). En el marco del Año de la Familia “Familia: corazón de la civilización del amor”
2. S. Juan Pablo II – II Encuentro Mundial: 1997 (4-5 octubre) Río de Janeiro (Brasil). “La familia: don y compromiso, esperanza de la humanidad”
3. S. Juan Pablo II – III Encuentro Mundial: 2000 (14-15 octubre)Roma (Italia). En el marco del Gran Jubileo del 2000 “Los hijos, primavera de la familia y de la sociedad”
4. S. Juan Pablo II – IV Encuentro Mundial: 2003 (25-26 enero)Manila (Filipinas). “La Familia cristiana: una buena noticia para el tercer milenio” *** S. Juan Pablo II (retransmisión tv)
5. Benedicto XVI – V Encuentro Mundial: 2006 (8-9 julio) Valencia(España). “Transmisión de la fe en la familia”
6. Benedicto XVI – VI Encuentro Mundial: 2009 (17-18 enero)Ciudad de México (México). “La familia, formadora de los valores humanos y cristianos” *** Benedicto XVI (retransmisión tv)
7. Benedicto XVI – VII Encuentro Mundial: 2012 (2-3 junio) Milán(Italia) “La familia – Trabajo y Fiesta”
8. Papa Francisco – VIII Encuentro Mundial: 2015 (26-27 septiembre) Filadelfia (USA) “El amor es nuestra misión, la familia plenamente viva”
9. El IX Encuentro Mundial tuvo lugar en Dublín (Irlanda) del 22 al 26 agosto 2018 con el tema elegido por el Papa “El Evangelio de la familia: alegría para el mundo”, en el marco de la exhortación apostólica postsinodal “Amoris Laetitia” y coordinado por el nuevo Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, presidido por el Cardinal K. Farrell.
10. El X Encuentro Mundial se celebrará en Roma el 2022 sobre el tema “Amor familiar: vocación y camino de santidad”.
Alabado sea el Señor por el gran regalo de la familia
Con vistas al décimo Encuentro Mundial de las Familias, se ha presentado recientemente la oración oficial que acompaña a este esperado evento. “Rezar -dijo en aquella ocasión el cardenal Kevin Joseph Farrell, prefecto del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida- es una forma de entrar en el corazón del Año Amoris Laetitia y de la preparación del evento en Roma. Muchas familias y muchas comunidades llevan mucho tiempo esperando poder caminar, al menos espiritualmente, hacia Roma. La oración los acompañará y les ayudará a captar el mensaje del encuentro”. La oración, compuesta con ocasión del 10º Encuentro Mundial de las Familias, nace de una profunda gratitud hacia el Padre Celestial por el gran don de la familia, lugar privilegiado para las relaciones amorosas, así como para la oración, como ha demostrado también la experiencia de la pandemia.
Oración oficial para el X Encuentro Mundial de las Familias
El amor familiar: vocación y camino de santidad
Padre Santo, estamos aquí ante Ti, para alabarte y agradecerte el gran don de la familia.
Te pedimos por las familias consagradas en el sacramento del matrimonio, para que redescubran cada día la gracia recibida y, como pequeñas Iglesias domésticas, sepan dar testimonio de tu Presencia y del amor con el que Cristo ama a la Iglesia.
Te pedimos por las familias que pasan por dificultades y sufrimientos, por enfermedad, o aprietos que sólo Tú conoces: Sostenlas y hazlas conscientes del camino de santificación al que las llamas, para que puedan experimentar Tu infinita misericordia y encontrar nuevas formas de crecer en el amor.
Te pedimos por los niños y los jóvenes, para que puedan encontrarte y responder con alegría a la vocación que has pensado para ellos; por los padres y los abuelos, para que sean conscientes de que son signo de la paternidad y maternidad de Dios en el cuidado de los niños que, en la carne y en el espíritu, Tú les encomiendas; y por la experiencia de fraternidad que la familia puede dar al mundo.
Señor, haz que cada familia pueda vivir su propia vocación a la santidad en la Iglesia como una llamada a ser protagonista de la evangelización, al servicio de la vida y de la paz, en comunión con los sacerdotes y todo estado de vida.
Bendice el Encuentro Mundial de las Familias.
Amén.